BMW Serie 3
No son cambios muy profundos en el terreno estético, pero servirán para que la berlina alemana siga ocupando su lugar de privilegio en el segmento de lujo. Lo más destacado está en la mecánica y la tecnología.
Sutiles cambios en el apartado estético y una profunda renovación en cuestiones mecánicas hacen que el BMW Serie 3 se mantenga en posición de privilegio para aguantar el acoso de sus numerosos rivales. En septiembre se pone a la venta la actualizada gama de la exitosa berlina media alemana con una oferta de diez motores, un mando iDrive mejorado, cambio de doble embrague, cambios en el sistema de tracción xDrive y mayor conectividad multimedia.
Los retoques estéticos que han sufrido la berlina y el Touring de la Serie 3 se pueden apreciar en el frontal, donde encontramos un capó más abombado, nuevos paragolpes traseros, biseles cromados en los faros y pilotos traseros e intermitentes con diodos –también en los faros delanteros al montar luces de xenón-. En el habitáculo hay más refinamiento por la combinación de materiales y nuevos colores, se han reposicionado los elevalunas en el lado del conductor y hay un nuevo mando iDrive para controlar todas las funciones de manera más sencilla y con unos botones de acceso directo a las más habituales.
La tracción sigue siendo trasera, y por primera vez se introduce una caja de cambios automática deportiva de siete marchas con doble embrague que se montará en los modelos más potentes de la gama, el 335i Coupé y el 335i Cabrio. También se ofrecerá el sistema de tracción total xDrivecombinado con motores de cuatro cilindros, ya que hasta ahora estaba limitado a los modelos de 6 cilindros.
La gama está compuesta por cinco motores de gasolina con potencias desde 143 CV en el 318 a 306 CV en el 335i, y cinco diésel de 143 a 245 CV. La novedad más importante está en el 330d, un bloque de seis cilindros en línea hecho en aluminio que ahora monta un sistema de inyección directa common rail de tercera generación y turbo de geometría variable, con lo que entrega una potencia de 245 CV y cuenta con un par de 520 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm. Las prestaciones son bastante interesantes, pues supera los 250 km/h, acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos y tiene un consumo medio de 5,7 litros con unas emisiones de CO2 de 152 g/km. También es novedad una caja automática deportiva de siete marchas con doble embrague destinada a motores de alto rendimiento.
En el terreno medioambiental, BMW continúa realizando numerosos avances que incorpora ahora en la Serie 3. Los modelos 318d, 320d y 330d cumplen la normativa de gases de escape Euro5, y el 330d monta un filtro de partículas y catalizador acumulador de NOx para reducir las emisiones de monóxido nitrógeno, indispensable para cumplir la normativa de emisiones Euro6. Además, algunos modelos incorporan el sistema ‘Star Stop’ que para el motor cuando no está en marcha, así como un indicador en el salpicadero del momento óptimo de cambio de marcha.
Los precios de venta no sufren un gran incremento, porque el mercado no lo admitiría. El modelo de acceso, el BMW 318i berlina, cuesta 29.500 euros, mientras que el más caro, el BMW 335d berlina asciende a 50.000 euros. Incluso se da la circunstancia de algunos modelos que han visto reducido su precio como consecuencia de pasar a un tramo de fiscalidad inferior en el impuesto de matriculación por las emisiones de CO2.